El uso de componentes de videoseguridad en el transporte público local ofrece numerosas ventajas:
Aumento de la seguridad
Evaluación en tiempo real de situaciones en el vehículo, seguimiento de delitos, apoyo a reclamaciones de seguros y disuasión delictiva.
Mejora de la sensación de seguridad
Mayor confianza de los viajeros y protección de los empleados
Aumento de la eficiencia
Mejor planificación del despliegue del personal de seguridad y análisis del flujo de pasajeros, formación específica para conductores
Prevención y análisis de incidentes
Reconstrucción de accidentes e identificación de lagunas de seguridad
Apoyo en las tareas de mantenimiento y explotación
Supervisión de la infraestructura y del estado de los vehículos para detectar con antelación las necesidades de mantenimiento